Gr-86 Fuentes de Ágreda - Cueva de Ágreda

POR TIERRAS DE ÁGREDA

Fuentes de Ágreda - Cueva de Ágreda

• Tiempo estimado: 2 horas 40 minutos
• Recorrido: 8,4 km
• Dificultad: media
• Bicicleta: 100%
• Época del año: todo el año

Corta etapa de 8,4 kilómetros, trazada con el objeto de aproximarse a la cumbre del Moncayo y al GR 90 (Sistema Ibérico Zaragozano), desde la localidad de Cueva de Ágreda. En su trayecto, remonta el estrato calizo que forma una abrupta elevación subsidiaria de la mole del Moncayo.

Lugares de interés

CUEVA DE ÁGREDA

En el barranco de la Dehesa, cerca de Fuentes de Ágreda, destaca un tupido bosque de quejigos y encinas. El quejigo coloniza las vaguadas con mayores condiciones de humedad, y la encina se sitúa sobre las laderas rocosas, fuera de las hondonadas que favorecen la inversión térmica. Dentro de esta masa se encuentran, en la mejor representación de la provincia, numerosos arces de Montpellier (árbol medio de pequeñas hojas trilobuladas y llamativo colorido otoñal).

Al collado de El Canto Hincado, se accede a través de una abrupta ladera rocosa por medio de una zigzagueante senda típica de alta montaña, restos de lo que fue el camino antiguo entre Fuentes de Ágreda y Cueva de Ágreda. En su parte final, proliferan los cojines de monja (Erinacea anthyllis), arbusto pinchudo y almohadillado propio de lugares venteados de la montaña mediterránea. A lo largo de la senda, el paisaje invita a detenernos, pudiendo recorrer con la vista todo lo caminado hasta entonces.

Ruta Fuentes de Ágreda - Cueva de Ágreda

Sale de Fuentes de Ágreda hacia el camposanto, ascendiendo por la calle que se dirige rumbo sureste, dejando la iglesia a la derecha y pasando junto a la fuente. A continuación, entra en un camino que al principio atraviesa una zona de campos de labor y, poco después, penetra en el monte de encinas y quejigos, donde además se ven con bastante frecuencia arces de Montpellier que se delatan con sus rojizos otoñales. El camino surca la vaguada del barranco de la Dehesa por su margen derecho. En el momento que tiende a alejarse de la vaguada, surge una vereda hacia la izquierda que se dirige hasta la misma vaguada, tras una corta e inapreciable bajada. Continúa por la vereda sumergiéndose en una densa masa de quejigos que dan un aire profundo al recorrido. Poco más arriba emerge del quejigar, desviándose de la vaguada hacia la izquierda por una senda, desdibujada en sus primeros pasos entre la espesura, que tras trazar una abierta «Z», remonta la ladera de encinas hasta el lomo de La Marcuela.

No llevamos ni tres kilómetros andados. Ahora, el encinar da paso al aulagar en un terreno áspero y pedregoso. Sobre el lomo, gira a la derecha y asciende un centenar de metros por el borde del encinar, hasta unos metros antes de que la ladera se haga más pendiente. Aquí, toma el inicio de una senda que, alejándose del encinar, se dispone a trazar su primera diagonal hacia la izquierda, hasta casi asomarse al barranco de la Marcuela. Tras varios zigzags, la senda supera la abrupta ladera pedregosa y llega a un collado que corta la cresta rocosa. Volviendo la vista atrás podemos comprobar cómo nos vamos elevando poco a poco. Allí abajo, a nuestros pies, queda encajonada la espesura de encinas y quejigos que atravesamos hace un rato; un poco más abajo, Fuentes de Ágreda y, más allá, un extenso paisaje agrícola salpicado de pueblos que se pierden en la lejanía.

Desde el collado, aborda un corto descenso, de unos doscientos metros, para alcanzar una pista a la altura de otro collado: El Canto Hincado. Ahora llevamos cinco kilómetros andados, e iniciamos el descenso por la pista rumbo sur. Prosigue recto sobre un cordal; pasa por encima de los corrales de las Majadillas, dejándolos a la izquierda y, más tarde, cruza el riachuelo de la Veguilla para iniciar un suave ascenso hasta el final de etapa, en el pueblo de Cueva de Ágreda. Entra en lo más alto del pueblo, pasando junto a la iglesia.

Diputación Provincial de Soria. Departamento de Desarrollo Económico y Turismo