Gr-86 Ólvega - Matalebreras
POR TIERRAS DE ÁGREDA
Ólvega-Matalebreras, caminos por el Madero
- • Tiempo estimado: 5 horas 10 minutos
- • Recorrido: 15 km
- • Dificultad: fácil
- • Bicicleta: 85%
- • Época del año: todo el año
Etapa de 15 kilómetros entre las localidades de Olvega y Matalebreras. El sendero da un rodeo por la sierra del Madero enlazando variados caminos (camino real, caminos de rodadura, cordales, sendas y calzada romana).
Lugares de interés
El Camino Real atraviesa la sierra del Madero por un amplio collado, conocido como Cruz Verde. Se dice que por aquí pasó Felipe IV camino de la Batalla del Segre, y en las visitas a su consejera Sor María de Jesús en el Convento de la Concepción de Ágreda. Al llegar al collado, existe un enorme montón de piedras, al parecer, formado por los caminantes que a su paso arrojaban una piedra. Estos montones se denominan Hermas, vestigios de un viejo culto pagano al dios de las encrucijadas y caminos, Hermes para los griegos y Mercurio para los romanos. Esta costumbre se observa como cierta en el Camino de Santiago, en el que existe un desmesurado montón, similar al de la Cruz Verde, conocido como Cruz de Fierro.
Próximo a Juan Cañón, existe un ejemplar centenario de quejigo, conservado hasta nuestros días por hacer de «mojón viviente» entre términos municipales.
En Valdeasnos se encuentra una masa de corpulentos ejemplares de quejigo o roble carrasqueño (Quercus faginea), árbol de características intermedias al roble y la encina. Estos monumentos vivientes, son vestigios de una vegetación que existió en mayor extensión en las vertientes sur y oeste del Madero. El árbol dominante de la sierra, la encina (Quercus ilex), se ve desplazada por el quejigo en aquellos enclaves calizos de suelos más profundos y con mayores condiciones de humedad.
Desde la posición privilegiada de la Sierra del Madero, se alcanza una magnífica vista de un buen conjunto de sierras del Sistema Ibérico. Además, se obtiene una buena perspectiva de la vertiente del Ebro, formada por un paisaje agrícola salpicado de pueblos que se pierde hasta los mismos Pirineos, visibles en días claros. En medio de todo este escenario destaca el omnipresente Moncayo, cuya mole se divisa, incluso, desde algunas cumbres del Pirineo Francés.
El descenso hacia Matalebreras se efectúa por un magnífico tramo de la calzada romana entre Muro de Ágreda (Augustóbriga) y Masegoso. Se aprecian dos ramales, probablemente uno de subida y otro de bajada. Llama la atención lo recto de su trazado a través de altozanos, buscando las posiciones más seguras ante posibles ataques.
La etapa finaliza en Matalebreras, pueblo situado junto a la carretera general de Soria a Zaragoza, a los pies de la sierra del Madero. En sus calles, se pueden ver varias casas solariegas con puerta de arco y escudo.
Ruta Ólvega - Matalebreras
El sendero sale por la carretera de Soria y a 500 metros, frente a una subestación eléctrica, se desvía a la izquierda por un camino que, atravesando unas tierras de labor, nos encajona en un pequeño barranco rocoso (La Pedriza).
Atraviesa el barranco en una ligera subida, hasta una repoblación de pinos que, a continuación, bordea hasta alcanzar el Camino Real, por el que inicia la ascensión, ahora surcando un suave cordal, por camino desdibujado, hasta la cuerda principal de la sierra del Madero. Aquí se encuentra el marcado collado de la Cruz Verde custodiado por un Hermas. En este punto, se abandona el Camino Real hacia el noroeste por una corta y pendiente cuesta, para alcanzar la mayor cumbre del recorrido: Cruz Verde.
Sigue por todo el cresterío descendiendo suavemente por medio de venteados pastos de montaña, hasta una agradable collado, próximo a un enorme quejigo. Pasa este monumento viviente dejándolo a la izquierda y, a la altura del collado de Juan Cañón, se adentra en una espesa masa mixta de pinos y encinas, iniciando el descenso hacia el oeste por la senda trazada sobre la vaguada.
A un kilómetro, el sendero sale de la espesura, a la altura de unos cultivos de cereal. Tras otro kilómetro siguiendo la misma tónica, corta con una marcada pista, que toma a la izquierda durante un centenar de metros, para abandonarla a la derecha, por camino de rodadura, y cambiar bruscamente de sentido cruzando campos de labor en dirección norte. Más tarde pasa junto a unos enormes quejigos y, a continuación, se adentra en una vaguada por la que asciende hasta volver de nuevo a la sierra del Madero, en el paraje de Valdeasnos.
De aquí descenderá hasta la carretera de Ólvega a Soria, por un bello tramo de calzada romana que atraviesa una espesa masa de encina y corta con la vía abandonada del ferrocarril. Estad atentos para tomar la calzada en el alto de la sierra. Un centenar de metros antes de llegar al alto, abandona el camino de rodadura en la vaguada, para dirigirse en oblicuo a la izquierda en dirección a un enorme quejigo aislado. Un poco más adelante, en el momento que nos asomamos a la otra vertiente, se empieza a dibujar el trazo de la calzada.
Tras cruzar la carretera de Ólvega a Soria, ahora en llano, toma primero una pista, y después, junto a una alambrada, un camino de rodadura, que atravesando al principio un monte de encina, después de rebollo, y al final entre cultivos, conduce directo hasta la localidad de Matalebreras.
Diputación Provincial de Soria. Departamento de Desarrollo Económico y Turismo
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Alojamiento más cercano
- Dormir: Ólvega, Matalebreras
- Comer: Ólvega, Matalebreras