Campaniforme en primavera y verano

• Incoado Bien de Interés Cultural en la categoría de Zona Arqueológica en 1980
• CARACENA

El yacimiento de Los Tolmos permite estudiar tanto el hábitat como los enterramientos durante la Edad del Bronce Medio. Su cronología, obtenida por carbono 14, se sitúa en torno al 1430 a.C. Este yacimiento sirve de enlace de las dos etapas, el Campaniforme del Bronce Antiguo y el horizonte cultural Cogotas I del Bronce Final, entre las que está cronológicamente situado.

Las cabañas encontradas disponen de planta ovalada, con suelo de tierra apisonada donde aparecen unos hoyos en los que se hincaban los postes sobre los que apoyaba la viga de la techumbre. La estructura quedaría recubierta con un entramado vegetal reforzado con barro.

Los restos de la fauna encontrados revelan que se trataba de un asentamiento estacional sólo ocupado en primavera y verano.

Se hallaron dos enterramientos, uno individual y otro triple, donde los cadáveres estaban depositados en una fosa, con las piernas flexionadas, las cabezas vueltas hacia atrás y desprovistos de ajuar.

El mundo de Los Tolmos define el Bronce Medio Meseteño como una etapa en la que perduran características de la época anterior y aparecen rasgos que alcanzarán su máximo desarrollo en el Bronce Final. Las cerámicas, realizadas a mano, son lisas o decoradas, siendo la incisión la técnica decorativa más representativa. Los elementos metálicos son de cobre. Hay también numerosos útiles realizados en hueso, así como encellas de cerámica, lo que muestra un aprovechamiento de los productos ganaderos.