Comarcas históricas y turísticas
Comarcas turísticas
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Ribera del Duero
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Soria y alrededores
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Tierra de Ágreda
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Tierra de Medinaceli
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Tierra de Pinares
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Tierra del Burgo
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Tierra del Valle
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Tierras Altas
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Tierras de Almazán
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Tierras de Berlanga
Diez Tierras y un solo territorio
• Distinguen ecosistemas y realidad histórica
El relieve provincial señala tres zonas bien delimitadas: la septentrional, quebrada y montañosa, donde dominan el pinar, el bosque y la pradera, a la que corresponden las comarcas de Tierras Altas, el Valle y Pinares; la central, más llana y de menor elevación, predominantemente agrícola, donde se ubican las comarcas de Tierra de Ágreda, Almazán y del Burgo; y la meridional, con desoladas planicies y altas laderas que ocupan las Tierras de Berlanga, Medinaceli y Ribera del Duero.
A esta inicial distribución, hay que añadir el papel del curso del río Duero, que nace en el montañoso norte, en los Picos de Urbión, y que, después, riega generoso el centro y Sur de la provincia, modificando y suavizando las tierras que baña.
Esta realidad geofísica ha marcado históricamente la configuración comarcal, que a lo largo del tiempo ha consolidado zonas específicas con entidad cultural propia. Actualmente, esa realidad geográfica y cultural se ha adaptado a las necesidades turísticas en una provincia con generosa oferta monumental, tanto artística como natural. Las diez demarcaciones resultantes distinguen ecosistemas y realidad histórica, generando, además, una distribución quizá más acorde con la realidad administrativa.
En suma, diez mundos en un solo territorio: Soria.